Un vuelo de Aerolíneas Argentinas que cubría la ruta entre Aeroparque y Santa Fe debió quedarse en el aire durante casi una hora, tiempo en el que no podían establecer contacto con la torre de control para pedir condiciones que les permitan aterrizar.
No los iban a atender: la torre de control no estaba funcionando, por motivos que aún no se precisaron.
La insólita situación ocurrió en el Aeropuerto Sauce Viejo, de Santa Fe, que recibe solamente un vuelo fijo al día, el AR1724 que llega de Buenos Aires. El mismo opera de lunes a sábado.
Este jueves, el vuelo partió algo demorado, a las 7:18 AM en lugar de las 7 como suele partir. Para las 8:04 ya estaba en las cercanías de Sauce Viejo, en el sur de la capital santafecina.
Sin embargo, nadie atendía el llamado para pedir información de aterrizaje. Allí comenzó a dar vueltas en círculos por arriba del lugar, cruzó a Entre Ríos, anduvo por Sauce Pinto. Sus pasajeros, al menos, tuvieron una buena vista aérea del verde que rodea al Paraná.
Recién 8:40 comenzó el operativo descenso, que concluyó a las 8:56. Tendría que haber aterrizado 50 minutos antes, según lo previsto. Así figura en el mapeo que realiza FlightRadar24.
El primero en denunciar la situación fue el piloto de avión Ezequiel Sicardi, quien en su cuenta de X publicó el recorrido de la aeronave y denunció que el controlador «se durmió». La versión no fue confirmada oficialmente.
Desde el gobierno de Santa Fe confirmaron a Clarín que la torre de control estuvo fuera de servicio hasta las 9 hs, aunque adujeron «cuestiones internas» de EANA, el organismo nacional que regula el tránsito aéreo). «Hasta el momento, el Ente desconoce fehacientemente», respondieron ante la consulta de qué había pasado con el torrero.
«Eso llevó a que el vuelo AR 1724 Y 1725 se hayan demorado», agregó. El 1725 es el avión que regresa de Santa Fe a Buenos Aires. El mismo, que debía llegar a 9:28 a Aeroparque, aterrizó a las 10:23.
D.D.