Con la mira puesta en las elecciones desdobladas de la provincia de Buenos Aires, el PRO bonaerense empezó a buscar un acuerdo interno para concretar la alianza con los libertarios del presidente Javier Milei, pero quiere ampliar la sociedad y sumar a los intendentes de la UCR, una propuesta que complica la negociación y que tiene el sello de Mauricio Macri.
Encabezado por su presidente, el diputado nacional Cristian Ritondo, el PRO bonaerense realizó una cumbre el último martes en la que hubo un amplio consenso para aliarse con La Libertad Avanza (LLA), pero todavía no un acuerdo total. Las resistencias, aunque minoritarias, son del sector alineado con Macri y su primo jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri.
Durante la reunión el intendente de Mar del Plata, Guillermo Montenegro, dio el puntapié inicial al plantear la necesidad de unir fuerzas con LLA para enfrentar al kirchnerismo. El diputado Diego Santilli apoyó y apuntó a las elecciones para la Legislatura bonaerense del 7 de septiembre. Lo mismo hizo Ritondo, quien está convencido de que «el peronismo va a ir unificado más allá de sus peleas», en alusión a la interna entre el gobernador, Axel Kicillof, y Cristina Kirchner.
Si bien entre los 30 dirigentes que participaron hubo bastante acuerdo, el freno de mano lo puso la intendenta de Vicente López, Soledad Martínez, muy cercana a Jorge Macri, quien junto a un grupo de legisladores planteó que no había que apurarse. Según confirmaron fuentes partidarias a iProfesional, no descartaron un acuerdo con LLA pero pidieron «seguir evaluando todas las opciones y el panorama».
¿Cómo influye la idea de sumar a la UCR en la negociación del PRO con Javier Milei?
El grupo de Martínez también planteó la importancia de que, en cualquier tipo de alianza, el PRO mantenga su «poder territorial», lo cual fue aceptado por todos los presentes. Ritondo marcó este punto a salida del encuentro, cuando resaltó ante la prensa que el partido amarillo tiene «gran representación» en varios distritos, incluso con «la mitad del concejo deliberante».
En ese marco de acuerdo parcial y de resguardo territorial, acordaron convocar a un nuevo encuentro con más de 300 concejales de toda la Provincia. Pero la novedad de la cumbre fue la propuesta de sumar también a los intendentes de la UCR, que tienen un amplio despliegue en el interior bonaerense.
Esa idea es promovida por Macri según indicó a iProfesional una fuente del PRO, que deslizó que «es como un intento de recrear Juntos por el Cambio, pero con los libertarios». La jugada vuelve más compleja la negociación con la Casa Rosada, que busca un acuerdo con dirigentes -como Ritondo, Santilli y Montenegro- y no entre partidos. Una forma de excluir de la conversación al ex presidente.
Atento a ese supuesto objetivo de Karina Milei y Sebastián Pareja, cabecillas del armado electoral de LLA, que se complementa con la idea de que la eventual alianza se dé mediante la incorporación de figuras del PRO a una lista que lleve el sello de LLA y no una nueva denominación, Macri mueve sus fichas para evitar que el partido amarillo se diluya en el violeta.
El mensaje de Macri a los libertarios, con la elección bonaerense en la mira
El ex presidente avaló la cumbre del PRO bonaerense y días atrás ya dio el visto bueno para acordar con los libertarios en la Provincia. Delegó la negociación en Ritondo, que mantiene diálogo fluido con la Casa Rosada y ya tuvo, junto a Santilli y Montenegro, dos reuniones muy publicitadas con Karina Milei y Pareja.
No obstante, Macri quiere esperar al resultado de las elecciones porteñas que se llevarán a cabo el 18 de mayo y que enfrenta al PRO y a LLA, mientras que los referentes bonaerenses tienen la mira puesta en los comicios de septiembre. El cronograma provincial le juega a favor al ex mandatario, dado que las alianzas deberían presentarse en julio y las listas en agosto.
Este miércoles Macri visitó Mar del Plata y se fotografió junto a Montenegro y Ritondo. Una señal de unidad frente al espacio de Milei en medio de la negociación bonaerense a la que le sumó una frase fuerte: «Los dirigentes que tenían precio ya fueron comprados», lanzó el ex mandatario. Todo forma parte del mismo mensaje: quiere que el acuerdo sea entre partidos y no con dirigentes sueltos del PRO.
Como titular del PRO bonaerense, Ritondo también dio muestras de coincidir con ese planteo. «Siempre las alianzas son de partidos», afirmó ante una consulta de la prensa tras la cumbre del último martes. El intento de sumar a un frente electoral con LLA también a los intendentes radicales forma parte de esa estrategia.
La interna radical, el problema de Milei y el equilibrio de Ritondo
La idea le añade complejidad a la negociación con LLA por varias razones. Por un lado, si se sumaran los intendentes de la UCR los libertarios encontrarían un fuerte contrapeso en el armado de la alianza, con el PRO y los radicales con poder territorial del otro lado de la mesa.
Esto sería clave porque el espacio de Milei no tiene por el momento candidatos competitivos para la provincia de Buenos Aires a nivel local ni tampoco nacional, con la excepción del diputado José Luis Espert, a quien el propio Presidente levantó en varias ocasiones como posible postulante.
Por otro lado, el radicalismo también tiene sus internas por el posicionamiento frente al gobierno de Milei. El titular de la UCR bonaerense es el senador Maximiliano Abad hasta que se resuelva la pelea judicial por la conducción con el ala del presidente del partido a nivel nacional, Martín Lousteau. Ese escenario ya marca que la idea del PRO de sumar intendentes radicales abrirá una difícil discusión interna.
Pese a todo, la mayoría de los dirigentes bonaerenses del PRO quieren apurar el acuerdo con LLA. Ritondo busca hacer equilibrio. Por un lado destacó que el Gobierno nacional ha mostrado «muchísima voluntad» para «tener una alianza» cuando «sienta en la mesa alguien como Karina Milei o el propio Presidente» y, por el otro, señaló que «Mauricio acompaña» y agregó: «Somos un equipo».
De esta forma, las elecciones desdobladas de la provincia de Buenos Aires apuran al PRO a deliberar sobre el formato de una eventual alianza con los libertarios del presidente Javier Milei que no implique una ruptura. La idea de sumar a los intendentes de la UCR y el esfuerzo de Mauricio Macri para que LLA no le desarme el partido mediante la captación de dirigentes individuales son ahora el eje central de la negociación.