Felicitas Alvite, imputada por el delito de homicidio simple con dolo eventual, tomó una contundente decisión tras su regreso a la red social Instagram para mostrar su cambio de look.
“La Toretto”, como se hacía apodar en sus imágenes y videos, recibió numerosas críticas por publicar contenido personal mientras cumple prisión domiciliaria. La exposición digital ocurrió poco después de que la Justicia le concediera dicho beneficio.
Previamente, Alvite había estado detenida en la Unidad Penitenciaria N°51 de Magdalena y actualmente reside en su domicilio del barrio de City Bell, en las afueras de La Plata.
En sus publicaciones, compartió una foto y un video filmado en el interior de su casa. El material provocó reacciones inmediatas tanto en redes sociales como en medios de comunicación. La familia del motociclista Walter Armand, quien murió tras ser atropellado en abril de este año, expresó su indignación por lo que consideró un acto de insensibilidad.
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DDI La Plata
Sin embargo, “La Toretto” tomó la contundente decisión de borrar sus redes sociales a raíz del escándalo que generó en su regreso para mostrar su nuevo peinado.
La madre de la v��ctima señaló públicamente que la actitud de Alvite fue “una provocación” y cuestionó el beneficio de la prisión domiciliaria. “La prisión domiciliaria no es justicia. Ella está en su casa mientras nosotros seguimos de duelo”, declaró.
La causa judicial continúa en etapa de instrucción y, de acuerdo con fuentes del Ministerio Público Fiscal, podría llegar a juicio oral hacia fines de 2025. Alvite está acusada de haber atropellado a alta velocidad la moto en la que circulaba Armand, en un hecho que fue registrado por cámaras de seguridad y generó un fuerte impacto en la opinión pública.
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Captura de Instagram
Tras su detención, la joven fue alojada en la unidad penal de mujeres en Magdalena. En mayo, el juez de garantías interviniente le concedió la prisión domiciliaria, medida que generó cuestionamientos por parte de los allegados a la víctima y sectores sociales.
Por su parte, los familiares de Walter Armand ratificaron su intención de impulsar una condena efectiva. Sostienen que la gravedad del hecho y el comportamiento posterior de la imputada configuran una actitud de desprecio hacia el proceso judicial y hacia la memoria de la víctima.