Alineamiento con EE.UU.: una estrategia de los años ’90 en un mundo de creciente multipolaridad

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“Durante los años ’90, con el gobierno de Carlos Menem, había un plan, algo de sentido. Actualmente cuesta encontrarle lógica a este alineamiento irrestricto con Estados Unidos”, comparó Diego Reynoso en la mesa de «Comunistas» al momento de sopesar el valor estratégico de la estrecha relación que el presidente Javier Milei defiende en la actualidad en materia de política exterior. La comparación con la administración del extinto expresidente apuntó a contrastar el pasaje del orden unipolar que definió las postrimerías del siglo XX con la multipolaridad creciente y el ascenso vertiginoso de China que caracteriza al primer cuarto del siglo XXI.

El interrogante de qué tan conveniente resulta la subordinación a una potencia en declive, mientras crecen actores como China y bloques alternativos de comercio internacional como los BRICS, fue analizado en el piso del estudio. El conductor del programa planteó la pregunta ordenadora: “¿Volvieron las relaciones carnales con Estados Unidos?”, lanzó Juan di Natale. El candidato a senador bonaerense Néstor Pitrola, invitado a la emisión, respondió “No solo fue carnal. Menen entregó el país entero con el Plan Brady. Volvieron algunas de esas joyas tiradas por la cabeza, como el Correo de Macri o AySA”, mencionó, en referencia al programa que a comienzos de la década del ’90 buscó reestructurar la deuda contraída por los países en desarrollo, en el contexto de la crisis de deuda latinoamericana.

El economista Félix Schmidt aportó una visión estructural. Recordó que durante la última década del siglo pasado, tras la caída del Muro de Berlín, el mundo aún giraba en torno de un centro claro y definido: “El escenario era unipolar. EE.UU. ofrecía un horizonte previsible. Actualmente hay mayor incertidumbre. Donald Trump un día sube aranceles y al otro las baja. La política exterior estadounidense se volvió errática”, observó. El economista remarcó que Argentina se alinea con un poder que ya no garantiza certezas, mientras descuida el vínculo con Pekín, su segundo socio comercial detrás de Brasil: “Hay una liviandad en la postura frente a China. Se pasa del desprecio ideológico a la necesidad económica”, apuntó.

El abogado y exlegislador Sergio Abrevaya sumó otra arista al debate: “Europa mantiene aranceles al dumping chino en el acero. Estados Unidos también. Pero Argentina los baja. ¿Cuál es la lógica? No hay estrategia industrial ni comercial. Solo gestos erráticos hacia uno u otro lado, según el día”, concluyó.

LB / FPT

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