En diálogo con Canal E, el economista uruguayo Juan Sánchez expresó su inquietud por la situación política y económica de la Argentina y señaló que una posible estabilización beneficiaría a toda la región.
“Estamos preocupados por ustedes”: la mirada desde Uruguay
“Estamos preocupados por ustedes”, dijo con énfasis Juan Sánchez, quien remarcó que Uruguay sigue de cerca la crisis argentina. “Los argentinos son los más parecidos a nosotros en el mundo”, agregó, apuntando a la cercanía no solo geográfica, sino también cultural y afectiva.
Consultado por si la situación electoral argentina modificó el flujo de inversiones, Sánchez fue directo: “Todavía no se ve una expansión de inversión argentina adicional para Uruguay. Ojalá sea porque están esperando ver si se puede arreglar la economía”.
Además, observó que algunos sectores del peronismo y otros espacios políticos bajaron el tono del discurso, lo que interpreta como un gesto de prudencia: “Los veo mucho más moderados. Me parece eso muy bien”, afirmó.
Sin embargo, cuestionó abiertamente el manejo del Gobierno argentino frente a escándalos recientes: “Hasta que no reconozca el Presidente que esto es un problema, no va a haber solución. Él es un Presidente, la hermana no es nada”, en referencia al rol de Karina Milei como Secretaria de la Presidencia.
“Ustedes lo llevan al extremo”: una advertencia sobre los límites de la institucionalidad
Desde Montevideo, Sánchez fue categórico al hablar del marco institucional argentino: “Nosotros no somos santos, pero ustedes lo llevan al extremo casi siempre”, dijo, haciendo referencia al nivel de crisis y confrontación en Argentina.
A su vez, planteó una reflexión que generó impacto: “Uruguay tiene un problema: no fue preso ningún presidente. En Argentina ya fue preso uno y ahora está en tela de juicio otro”, haciendo una crítica a la aparente falta de consecuencias legales para los líderes uruguayos, que en el exterior es visto como “una ventaja”.
Contrario a lo que muchos suponen, Sánchez consideró que “los escándalos y juicios a expresidentes pueden ser un síntoma de salud democrática”: “Eso dice de un buen marco institucional, a pesar de que también está en tela de juicio la justicia”, opinó.
También se mostró preocupado por recientes episodios de censura y amenazas a periodistas: “Me preocupa mucho que un gobierno amenace a periodistas para allanarles la casa y todo lo demás”, dijo, en defensa de las libertades civiles, un rubro en el que Uruguay se posiciona en el puesto número 4 a nivel mundial.
Al cierre, compartió datos que explican la percepción externa positiva sobre su país: “Uruguay está 11 en el mundo en índice de democracia, 12 en Estado de Derecho, 7 en baja corrupción y 4 en libertades civiles. No me creo todo, pero así nos ven desde afuera”.
Y concluyó con un mensaje claro para la Argentina: “Ojalá que se calmen un poco y se den cuenta de que es importante cómo los ven de afuera”.