La reciente decisión del Gobierno de desregular el servicio postal ha generado un impacto significativo en el Correo Argentino, afectando directamente a los cerca de 12 mil empleados que trabajan en la empresa estatal. La medida, que busca abrir el mercado a la competencia privada, pone en jaque no solo el futuro laboral de los trabajadores sino también el sistema de distribución de cartas y mensajería en todo el país.
La situación actual del Correo Argentino
El Correo Argentino es la empresa más grande del sector postal en el país, con una red de 1.400 sucursales y postales en todas las provincias de la Argentina. Sin embargo, la empresa ha enfrentado una grave situación económica en los últimos años, con un déficit que superó los $71.322 millones en 2023. Esto ha llevado al Gobierno a implementar un plan de retiros voluntarios con el objetivo de reducir el personal de la empresa a menos de 9.500 empleados.
El impacto en los trabajadores
La desregulación del servicio postal pone en riesgo el futuro laboral de miles de trabajadores del Correo Argentino. La entrada de empresas privadas en el mercado puede llevar a una reducción significativa de la plantilla laboral de la empresa estatal, lo que provocaría un aumento en la inseguridad laboral ya existente y el desempleo en el sector postal.
«Este es un golpe duro para los trabajadores del Correo Argentino», afirmó un trabajador de la empresa entrevistado por este medio y en esa línea continuó «La desregulación del servicio postal es una forma de privatizar la empresa y dejar sin trabajo a miles de personas que han dedicado años de su vida a esta institución».
El sistema de distribución en jaque
La desregulación del servicio postal también pone en riesgo el sistema de distribución de cartas y mensajería en todo el país. El Correo Argentino es la única empresa que ofrece un servicio universal de distribución de correo en todo el país, llegando a áreas remotas y rurales donde las empresas privadas no tienen interés en operar.
«La entrada de empresas privadas en el mercado puede llevar a una reducción en la cobertura del servicio postal en áreas remotas y rurales», afirmó un experto en el sector. «Esto dejaría a miles de personas sin acceso a servicios básicos como la recepción de correo y paquetes».
Un futuro incierto
La desregulación del servicio postal ha generado un futuro incierto para el Correo Argentino y sus trabajadores. La venta de activos inmobiliarios y la reducción de la plantilla laboral pueden ser solo el comienzo de una serie de medidas que llevarán a la empresa a una situación de crisis aún mayor.