En 2021, Hertz, una de las empresas de alquiler de vehículos más grandes del mundo, anunció la adquisición de 100.000 vehículos eléctricos de Tesla, lo que fue un hito en la transición hacia una flota más sostenible. Sin embargo, en 2024, la compañía enfrenta desafíos significativos relacionados con esta decisión e implementó una estrategia innovadora para vender estos vehículos directamente a sus clientes.
La compra masiva de vehículos Tesla por parte de Hertz en 2021 se percibió como un movimiento audaz hacia la electrificación de su flota, alineándose con las tendencias globales de sostenibilidad y reducción de emisiones. La intención era ofrecer a los clientes una experiencia de conducción moderna y ecológica, aprovechando la creciente popularidad de los vehículos eléctricos, según The Sun.
A pesar de las expectativas iniciales, Hertz enfrentó varios obstáculos con la integración de los vehículos eléctricos en su flota:
Para mitigar las pérdidas asociadas con la depreciación y los costos operativos, Hertz implementó una estrategia innovadora: ofrecer a los clientes la opción de comprar los vehículos eléctricos que alquilan. Esta iniciativa permite a los clientes adquirir vehículos a precios competitivos y a Hertz reducir su inventario de manera eficiente, según explica el sitio especializado Híbridos y eléctricos.
Esta estrategia presenta múltiples ventajas para los clientes:
La decisión de Hertz de vender una parte significativa de su flota de vehículos eléctricos puede tener repercusiones en el mercado:
Aunque Hertz decidió reducir su flota de vehículos eléctricos, la tendencia global hacia la movilidad sostenible continúa. Es probable que, con mejoras en la tecnología de baterías, una infraestructura de carga más desarrollada y una mayor aceptación por parte de los consumidores, los vehículos eléctricos desempeñen un papel cada vez más importante en las flotas de alquiler en el futuro.